Todos sabemos que el ajo es uno de los alimentos naturales más completos. Sus beneficios se conocen desde hace miles de años. Los expertos aconsejan consumir un poco de ajo a diario por sus cualidades antisépticas y antibióticas, mejor aún si es en ayunas y crudo… y lo haríamos, si no fuera por el aliento ¡y ese ardor en el estómago!
Pero presta atención: tenemos una excelente noticia para ti. Se puede obtener todas las virtudes del ajo multiplicadas por diez… sin sus efectos poco deseados. Te presentamos el ajo negro, el superalimento con todos los “pros” del ajo, y sin algunos molestos “contras”.
Además, hemos preparado una selección de productos, productores y formatos de este tipo de ajo, para que sea más sencillo para tí conocerlo y elegir el que mejor se adapta a tus necesidades. Por supuesto a lo largo del artículo tendrás oportunidad de conocer mejor este alimento, pero aquí está nuestra selección por su alta calidad y su ajustado precio.
Si quieres saber más de este súperalimento no te pierdas este artículo.
Qué es el ajo negro
El ajo negro no es otra cosa que la cabeza del ajo común, sin pelar, sometida a un proceso de maduración controlada en cámaras de madera cerradas.
Se debe mantener a una <strong>temperatura constante de 60 °C y con un alto porcentaje de humedad, que se consigue evaporando agua de mar.
Después de treinta días de maduración se trasladan los ajos a otra cámara, donde atraviesan un período de oxidación, entre treinta y cuarenta y cinco días.
¿Cuál es el resultado?
Un ajo que con apariencia dorada por fuera pero que al abrirlo es de un color negro intenso. Tiene una textura tierna, como la del ajo asado, un sabor dulce, casi frutal y un aroma muy suave. Gracias a ello, al consumirlo no perjudica el aliento ni provoca malestar estomacal.
Lo más importante es que este bulbo posee las virtudes del ajo fresco, pero muchísimo más concentradas; tanto, que un solo diente de ajo negro proporciona la energía equivalente a una cabeza de ajo común. Esta es razón que convierte al ajo negro es un auténtico superalimento.
Dónde comprarlo
¿Dónde conseguirlo? Además de en Superalimentos.pro está a la venta en multitud de sitios web, en farmacias y parafarmacias, herboristerías, la sección de productos naturistas de las grandes superficies comerciales y por supuesto en Amazon, donde lo encontrarás en diferentes formatos y fabricantes.
¿Te vas a animar a probarlo?
Un descubrimiento reciente: historia del ajo negro
No se tienen noticias ciertas del origen del ajo negro. Se dice que es un ingrediente muy antiguo de la cocina coreana y tailandesa pero no se sabe a ciencia cierta.
En todo caso, su redescubrimiento, que permitió introducir su uso en Occidente, parece que remonta a los años 70 del pasado siglo. Un biólogo japonés, buscando el modo de reducir el fuerte olor y el regusto del ajo, ideó un sistema de cocción o madurado muy lento con calor y humedad.
Al analizar el resultado, comprobó con sorpresa que el ajo había tomado un color negro intenso y que su sabor y su aroma se habían suavizado. Pero lo más importante fue que el análisis reveló una potenciación extraordinaria de las propiedades naturales del ajo. Este fue el comienzo de su fama como superalimento.
En el año 2007, durante una visita a Osaka, el famoso chef español Ferrán Adriá descubrió este exquisito condimento y lo trajo a la península ibérica, usándolo como ingrediente gourmet en su famoso restaurante.
Desde el año 2008 se elabora en los Estados Unidos, en la zona de California, y es uno de los ingredientes estrella en la cocina de diseño. Durante esa época también fue presentado en Inglaterra, en un programa de la BBC, y su fama siguió extendiéndose.
Hoy el ajo negro es parte de la nueva cocina mediterránea, que combina sabores refinados con una vuelta a lo natural.
La producción de ajo negro en España se concentra en las provincias de Murcia, Córdoba y Cuenca, donde se produce un bulbo de excelente calidad reconocida internacionalmente.
Potente antioxidante y otras propiedades del ajo negro
Las virtudes de este superalimento provienen de su alto contenido en tres grupos fundamentales de nutrientes: aminoácidos, vitaminas y minerales.
- Los aminoácidos son las moléculas que construyen las proteínas. Sabemos que estas son esenciales para la vida y tienen funciones tan importantes como la formación y crecimiento de los músculos, cartílagos y huesos. También tienen propiedades antioxidantes, inmunológicas y enzimáticas.
Los seres humanos necesitamos veinte aminoácidos para vivir. Nueve de ellos, llamados “esenciales”, no pueden ser sintetizados por nuestro organismo y debemos obtenerlos de los alimentos.
El ajo negro contiene todos los aminoácidos esenciales: fenilalanina, histidina, isoleucina, leucina, lisina, metionina, treonina, triptófano y valina.
- Las vitaminas, fundamentales para el buen funcionamiento de los órganos y del metabolismo en general. Algunas de ellas, como la vitamina C, ejercen una acción antioxidante, neutralizando los radicales libres (moléculas inestables que, si se producen en exceso, causan el envejecimiento celular y enfermedades degenerativas). El ajo negro es rico en vitamina B2, B6 y C.
- Los minerales, elementos naturales inorgánicos que tienen funciones tan importantes como formar los huesos, producir hormonas y regular el ritmo cardíaco. En el ajo negro encontraremos calcio, fósforo, hierro y zinc.
Al partir o machacar los dientes de ajo se forma alicina, sustancia conocida por su potencial para eliminar bacterias y hongos. Además, este superalimento contiene el doble de lípidos y sacáridos que el ajo común, por lo que aporta gran cantidad de energía.
Ajo negro: un completo mix de beneficios
Gracias a la presencia de los compuestos mencionados, el ajo negro aporta enormes beneficios que te interesará conocer:
#1 Antimicrobiano y antifúngico
La alicina, al combinarse con otros componentes del ajo negro, previene y combate infecciones bacterianas y hongos como la cándida.
#2 Antialérgico y fortalecedor del sistema inmunitario
Este fabuloso superalimento refuerza las defensas del organismo aumentando el número de linfocitos (un tipo de glóbulos blancos que nos protegen contra las infecciones). Su consumo ayuda a prevenir y combatir gripes, resfriados y estados alérgicos.
#3 Antioxidante
Gracias al efecto antioxidante de la vitamina C y los aminoácidos, el ajo negro reduce la presencia de radicales libres, previniendo el envejecimiento prematuro de los tejidos y la aparición de enfermedades crónicas. Se está estudiando la acción del ajo negro en la prevención de algunos tipos de cáncer, como el de estómago, colon y mama.
#4 Previene enfermedades cardiovasculares
Reduce los niveles de colesterol malo y lípidos en sangre, al mismo tiempo que evita la calcificación de las arterias. De este modo ayuda a disminuir el riesgo de enfermedades cardiovasculares.
#5 Disminuye la tensión arterial y reduce la migraña
Por su contenido de elementos vasodilatadores, este poderoso bulbo mejora la circulación arterial disminuyendo la presión sanguínea, que en muchos casos es causa de migrañas y dolores de cabeza.
#6 Regenerador de los tejidos
Gracias a los aminoácidos que contiene, el ajo negro fortalece y repara los tejidos, especialmente la piel y los huesos, y contribuye a la buena actividad neuronal.
#7 Energizante
Las vitaminas, minerales y azúcares naturales presentes en el ajo negro lo convierten en un energizante extraordinario que aumenta la resistencia física y el vigor corporal. Es un superalimento ideal para deportistas. Se recomienda consumirlo antes de actividades físicas o intelectuales de alta exigencia. Además, combate la depresión y el estrés.
¿Cómo consumir este superalimento?
Este gran aliado de la salud puede consumirse solo o como parte de nuestras comidas. Es muy aconsejable tomarlo en ayunas y por la mañana, ya que si lo ingerimos por la noche su efecto energizante (que dura varias horas) podría impedirnos dormir.
La ración recomendada es de uno a tres dientes de ajo negro al día. Es delicioso untado en las tostadas del desayuno y puede reemplazar al ajo blanco en nuestros platos favoritos.
Precauciones en el uso del ajo negro
Se desaconseja el consumo de ajo, tanto negro como fresco, en las personas que estén tomando anticoagulantes. El ajo podría aumentar la acción de estos medicamentos. Tampoco deben consumir ajo quienes estén a punto de pasar por una cirugía cardíaca.
Las mujeres que estén amamantando pueden consumir ajo negro en pocas cantidades, como condimento en las comidas, pero no se recomienda su consumo en concentrados o solo, ya que puede alterar el olor y sabor de la leche materna. Está contraindicado durante el embarazo y puede producir alteraciones durante el ciclo menstrual.
¿Se puede preparar ajo negro en casa?
Desde que se han popularizado sus maravillosas propiedades, hay muchas personas que desean preparar el ajo negro en sus casas de manera artesana. Ya circulan por las redes varios videos explicando cómo obtenerlo, utilizando arroceras y ollas de temperatura constante.
En general, los resultados no son muy alentadores. Si bien se pueden obtener algunas cabezas de ajo negro, muchos de los bulbos se queman o se estropean. Además, el producto que se obtiene es de una calidad inferior. Otro inconveniente es el fuerte olor que emana de la cámara en los primeros días.
Considerando el tiempo de maduración que necesita el ajo para transformarse (no menos de un mes), el procedimiento no compensa por el gran gasto de energía que implica.
De momento, el ajo negro que se produce en explotaciones especializadas es el más recomendable.
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Advertencias de tomar ajo negro
Ante cualquier duda, sobre intolerancias, alergias o efectos secundarios habla siempre con tu médico antes de empezar a consumir ajo negro por tu cuenta si crees que tienes algún tipo de intolerancia o de problema. Algunas precauciones y advertencias que debes tener en cuenta son:
El ajo se considera seguro para la mayoría de las personas cuando se toma por vía oral en cantidades apropiadas. El ajo es un alimento seguro y se ha estudiado incluso en periodos de 7 años. Cuando se toma por vía oral, el ajo puede causar mal aliento, una sensación de ardor en la boca o el estómago, acidez estomacal, gases, náuseas, vómitos, olor corporal y diarrea. Aunque el ajo negro minimiza todos estos problemas, más presentes en el ajo tradicional y por supuesto tomado en crudo. El ajo también puede aumentar el riesgo de sangrado. Ha habido casos de sangrado después de la cirugía en personas que han tomado ajo. Ha habido algunos casos de asma en personas que trabajan con ajo, y es posible que algunas personas puedan presentar otras reacciones alérgicas aunque no es común.
El ajo crudo especialmente el blanco puede causar problemas en la piel sensible. El ajo crudo puede causar irritación severa de la piel cuando se aplica directamente.
Como siempre, consulta con tu médico ante cualquier duda sobre intolerancias, alergias o incompatibilidades.